Te doy la bienvenida a esta web y blog sobre yoga, su práctica y su sabiduría. También encontrarás mis propias experiencias sobre el yoga, viajes y reflexiones entre otras.
Y que mejor manera de hacerlo que con un saludo lleno de significado y simbolismo como Namasté, el cual ha sido fuente de inspiración para dar nombre al pequeño estudio de yoga donde imparto mis clases, Namaste Yoga Zentroa.
Namasté es una forma de decirse “hola” y “adiós” en India y también en otros paises orientales como Nepal, por los budistas, hindúes, jainistas o sijs. Puede usarse para saludarse o despedirse en las acciones de la vida cotidiana, pero la palabra encierra en sí misma un significado mayor que a priori no es identificable.
Como en muchas ocasiones en el mundo del yoga, el idioma de donde proviene esta palabra es de sánscrito y se compone de dos partes. Por un lado se encuentra el vocablo “namas” cuyo significado es “reverencia o adoración” y por otro lado “te” que es un pronombre personal que significa “tu o usted”, pero se traduce como “a ti” o “a usted”. De este modo nos encontramos con la forma más noble y digna que un ser humano puede saludar a otro, “te reverencio a ti” o “me inclino ante ti”.
Se trata de una forma pura y limpia en la que una persona se reconoce a sí misma en los demás y saluda a modo de mostrar ese reconocimiento. Dicho de otro modo es que la parte más profunda de una persona, la esencia, saluda a la misma parte, o esencia, de la otra persona.

Es tal el sentido de respeto que este gesto expresa, que la idea de que todas las personas comparten la misma esencia divina, la misma energía, se hace sólida mediante la propia experiencia. Es por esto que el gesto y palabra unidas, generan una gran fuerza pacificadora, al sentir que disponemos en nosotros el mismo origen que el de el propio universo.

Cuando nos saludamos de esta forma y se hace desde la autenticidad, se crea un vínculo natural entre las personas que se saludan, más allá de intereses, expectativas o roles sociales. También es un modo de expresar los buenos deseos hacia el otro.
En las clases de yoga solemos emplear este saludo al finalizar la clase, ya que es en este momento cuando el ambiente y la psique de cada practicante están más calmadas y esto posibilita que emerja la identidad verdadera que saluda y reconoce a sus iguales.
“Yo honro el lugar dentro de ti donde el Universo entero reside. Yo honro el lugar dentro de ti de amor y luz, de verdad, y paz. Yo honro el lugar dentro de ti donde cuando tú estás en ese punto tuyo, y yo estoy en ese punto mío, somos sólo Uno.”
– Namaste –
Urtzi Artola